Llegó el gran día. La Pantera emprendía su primer viaje a la conquista de Granada. Una expedición peculiar y que resultó inolvidable para los 13 miembros de nuestra peña que se hicieron más de 800 kilómetros en un solo día.
Las valientes panteras madrugaron y se echaron a la carretera para acompañar a nuestro equipo en su objetivo de conseguir los tres puntos a los pies de Sierra Nevada. Gracias a la puntualidad de peñistas y conductores, el autobús apenas se detuvo en la pimera parada, en las proximidades de Méndez Álvaro, de modo que el terrible frío no llegó convertirse en un problema. En menos que canta un gallo, llegamos a la segunda parada, donde los demás compañeros de La Pantera y nuestros amigos de la Peña de Boadilla del Monte nos esperaban con ansias de emprender esta gran aventura. Una convivencia con sabor a cerveza Mahou y que recordaba a esas tardes de domingo en el fondo sur del Vicente Calderón, cuando el Manzanares nos regalaba alguna que otra pulmonía motivada por la humedad en el ambiente.
En torno a las siete y media de la mañana, una vez cargadas todas las provisiones y realizadas las presentaciones y fotos de rigor, el grupo se puso en marcha al grito de “alirón, alirón, el Atleti es campeón”. Aquellos que perseguían echar una cabezadita durante el trayecto a la ciudad andaluza pronto se dieron cuenta de que ese objetivo iba a ser difícil, pues apenas recorridos los primeros 20 kilómetros, el autobús se convirtió en una autentica fiesta. Entre refrigerios y bocadillos, los más animosos fueron repasando todo el repertorio del cancionero rojiblanco. El compañero y gran amigo Juan Ángel 'El Ruso' asumió el papel de embajador de La Pantera y estrechó lazos con los peñistas de Boadilla en los asientos traseros del bus. Gracias a sus grandes dotes como relaciones públicas, en cuanto nos dimos cuenta, los amigos de la zona noroeste de Madrid ya estaban coreando su nombre con emoción.
Tras unos cuantos kilómetros a la espalda y ciertos problemillas con los aseos del autocar, la expedición realizó la primera parada de descanso en una estación de servicio. La ocasión fue aprovechada para internacionalizar nuestra pasión junto a unos simpáticos turistas asiáticos, que no dudaron en sumarse con entusiasmo a aquella gran fiesta colchonera a golpe de bombo y ondear de bufandas. “Son del Atleti, los chinos son del Atleti” fue la proclama definitiva tras la cual nuestros colegas de Extremo Oriente abrazaron para siempre la fe en el profeta Luis Aragonés.
Horas después tuvo lugar el tan esperado momento de la llegada a Granada, donde las panteras tomaron el centro de la ciudad con himnos alusivos a esta obsesión nuestra llamada Atlético de Madrid. Tras el tradicional tapeo granadino, tuvimos la ocasión de confraternizar con unos amigos malagueños, también rojiblancos, con los que unimos fuerzas gritando el nombre de Bernardino, el cabecilla de su expedición, y emprendiendo acto seguido la marcha hacia el Estadio de Los Cármenes. El acceso a la zona destinada a los hinchas colchoneros resultó cómodo, pudiendo incluso sentir la bienvenida de los aficionados nazaríes que nos recibieron calurosamente. A partir de ahí, la nutrida expedición colchonera se puso manos a la obra y se dejó el alma animando al equipo hasta que el árbitro pitó tres veces indicando el final del partido.
En lo estrictamente futbolístico, el choque acabó en tablas. Aunque gozamos de varias ocasiones, solo supimos aprovechar una llegada de Lodi, mientras que el Granada convirtió en gol un preciso cabezazo de Germán apenas siete minutos después de que nos hubiéramos adelantado en el marcador. Resultado al margen, lo más importante de este inolvidable día ha sido vivir en primera persona la ilusión de los peñistas de La Pantera y compartir con otros seguidores la gran pasión que nos une y nos impulsa a cruzar media España en menos de 24 horas para alentar a nuestros jugadores. ¡Aúpa Atleti!
Crónica del primer viaje de La Peña La Pantera redactada por Iván Salas.
